Esta es una quebrada ubicada en el cantón Zaruma. Hace pocos años fluía agua cristalina; ahora es un cauce seco. |
Para detener efectos de minería sin parámetros técnicos
Machala.- La demanda por delito contra el medio ambiente presentada el año pasado ante el Fiscal de Delitos Ambientales de El Oro por el agricultor zarumeño Aldo Romero Carreño, en contra de varios mineros, donde denunciaba el secamiento de vertientes donde antes fluía agua cristalina en el sitio San Antonio de Zaruma, ha sido un llamado a la reflexión a la comunidad de los cantones del Altiplano orense y de la provincia en general.
Si bien se conoce que a pesar de las pruebas aportadas, fundamentado en informes de técnicos de la ex Dirección de Minería de El Oro y de los peritos de la misma Unidad de Protección del Medio Ambiente de la Policía de El Oro, el Fiscal se habría abstenido de acusar a varios mineros por delito ambiental. Sin embargo, la acción propuesta por Romero Carreño ha servido de antecedente para que la ciudadanía reaccione sobre la afectación que está recibiendo la naturaleza que ahora tiene derechos en la Constitución del Ecuador, entre ellos a un ambiente sano que garantice el buen vivir, donde se incluye obviamente la salud de la población.
El Foro Nacional de los Recursos Hídricos durante varios años viene insistiendo que una visión y modelo extractivista de los recursos naturales acarrea consecuencias ambientales y sociales irreparables y con impactos negativos para poblaciones de escasos recursos económicos y afectación a las fuentes, afluentes y nacimientos de agua.
El pasado 2 de septiembre del presente año, representantes de las 19 comunidades del Cantón las Naves y de la Provincia de Bolívar, reunidas en Asamblea Pública y luego de debatir, compartir información sobre las concesiones mineras en el país y en la Provincia de Bolívar y discutir sobre los impactos sociales, ambientales, económicos de éstas para las comunidades, resolvieron, entre otras, declarar a los cantones de Las Naves, Echandía y parte de Guaranda libre de minería a gran escala y a cielo abierto; rechazar rotundamente la presencia de la compañía Salazar Resources conocida como Curimining S.A y demandar su inmediata salida para que vuelva la tranquilidad y la paz a sus comunidades; demandar a los municipios de las Naves, Echeandía, Guaranda, y a la Prefectura de Bolívar que declaren a las zonas noroccidentales del subtrópico bolivarense como zonas de alta producción agrícola y ganadera, eco turística y ecología libres de minería, etc.
Si bien las actividades de la pequeña minería y minería artesanal en la parte Alta de El Oro aportan dinamia comercial a la zona y ocupa mano de obra, inclusive mano de obra barata que viene desde Perú, sin embargo nadie duda de los graves impactos ambientales a los recursos naturales, cuya restauración tomaría decenas de años; de igual manera el grave impacto contra la salud de la población. Los principales recursos afectados de esta actividad antitécnica ha provocado el deterioro de los recursos hídricos, advirtiéndose secamiento de vertientes, incluso de fuentes de agua para consumo humano, por ello se hace imprescindible que los ciudadanos de los cantones de Zaruma y Portovelo apunten hacia la conformación de un “Comité de Protección de los Recursos Hídricos”, para proteger ríos, quebradas y vertientes; y además para exigir a las autoridades de minería y Medio Ambiente para que hagan cumplir los parámetros técnicos para la explotación minera a todo nivel, y de esta manera frenar la probable demanda internacional que está preparando las autoridades de Tumbes, Perú, por envenenamiento de las aguas del río Puyango-Tumbes.
No hay comentarios:
Publicar un comentario